El presidente de la UEFA, Michel Platini, advirtió que los árbitros detendrán los partidos de la Eurocopa si los futbolistas son objeto de abuso por parte de los espectadores, mientras el fantasma del racismo en Polonia y Ucrania dominó el miércoles una conferencia de prensa para lanzar el torneo.
Platini dijo que la organización que dirige el fútbol europeo autorizó a los árbitros a "detener temporalmente el partido y finalmente cancelarlo" si persiste el racismo.
Las preocupaciones surgieron la semana pasada cuando un programa británico de televisión mostró hechos de discriminación y violencia en partidos recientes en las dos naciones coorganizadoras.
A dos días del comienzo de la Eurocopa, el director de una campaña europea contra la discriminación en el fútbol admitió que planteaba potencialmente mayores problemas que torneos anteriores.
"No hay dudas de que estamos preocupados más por este torneo que cualquier otro", dijo el director de Fútbol contra el Racismo en Europa (FARE), Piara Powar.
La UEFA invitó a la FARE para que le ayude a seleccionar un grupo de 31 monitores expertos que vigilarán a los hinchas de cada equipo para detectar cualquier inscripción, cánticos o comportamiento dentro de los estadios que violen la política antidiscriminatoria de la UEFA.
Powar dijo que Platini "comprende lo que sucede" y que un equipo podría incluso ser expulsado del torneo por una tercera condena de los organismos judiciales independientes de la UEFA.
Hace cuatro años, la UEFA multó a la asociación nacional croata en 20.000 francos suizos (en ese entonces casi 20.000 dólares) por las banderas y cánticos neonazis de sus hinchas durante la Eurocopa del 2008 contra Turquía en Viena. En la versión del 2012, Croacia enfrentará a España, Italia e Irlanda en Polonia.
"Hay cada vez más nacionalismo en Europa", afirmó Platini. "Se puede sentir esto en varios partidos de fútbol. Existen algunas preocupaciones, pero se ha logrado mucho gracias al fútbol".
"Detendremos el partido si hay problemas", aseguró.
Sin embargo, Platini anticipó que el delantero italiano Mario Balotelli recibirá una tarjeta amarilla si cumple una reciente amenaza de retirarse del campo de juego como protesta por cualquier abuso.
"No es el jugador, señor Balotelli, quien está a cargo" de arbitrar un partido, aclaró el presidente de la UEFA.